En primer lugar, debemos aclarar que aunque un niño puede llegar a experimentar ambas dificultades al momento de escribir, lo cierto es que la disortografía y la disgrafía se caracterizan por ser trastornos del aprendizaje totalmente diferentes.
Esta es la razón por la que a continuación, vamos a detallar cuáles son sus diferencias y las actividades que se deben realizar para combatir a estas dificultades.
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¿Qué es la disortografía?
Cuando hablamos de disortografía, hacemos referencia a la dificultad que tienen algunos niños de poder construir un discurso escrito aplicando la normativa ortográfica correcta.
Se trata de un trastorno que se vincula con la dislexia, siendo esta la razón por la que estos trastornos se pueden confundir.
En estos escenarios, el alumno puede tener cierta dificultad de aprendizaje sin necesidad de presentar problemas en la lectura o de alguna discapacidad intelectual.
¿Cuáles son las actividades para trabajar disortografía?
Una de las actividades más eficientes que se aplican al momento de afrontar la disortografía, es entrenar la lectura, algo que se debe hacer con el objetivo de enseñar de forma correcta todas las pausas y entonaciones que se deben aplicar antes y después de cada palabra.
Sin embargo, también existen otras técnicas que cumplirán con la misma función, como es el caso de las siguientes:
Descomponer palabras por sílabas
Se enseña a través de palmadas para luego escribirlas de forma separada con el uso de guiones. Posteriormente, al alumnado se le presentan algunas palabras para que sean ellos quienes las descompongan de manera acertada.
Detectar palabras intrusas
Al alumno se le deben presentar cierta cantidad de palabras en las que una de ellas, deberá estar mal escrita. En este tipo de palabras se deben resaltar las que el alumno suela tener mayor dificultad.
Un ejemplo de ello puede ser por ejemplo:
Mar/Nar
Pez/Bez
Calamar/Caramal
Hacer sopa de letras
Además de contribuir en la enseñanza de la composición de palabras, se trata de una actividad que también ayudará mucho a mejorar la atención de este tipo de alumnos.
Ordenar palabras desordenadas
Puede llegar a parecer muy fácil, pero lo cierto es que a algunos alumnos les llegará a costar ordenar algunas palabras.
Por ejemplo, si quieres hacer énfasis en la palabra “papel” puedes desordenarla como “aplelp” de manera que el niño cumpla la función de organizarla de forma correcta.
Oraciones con espacio en blanco
Se trata de una actividad en la que se presentará una lista de varias oraciones con espacios en blanco, en los que el alumno deberá escribir las oraciones de manera correcta.
Reeducación de ortografía
La mayoría de los niños que sufren del trastorno de disortografía, se caracterizan por tener algunos errores de ortografía que se pueden llegar a agudizar si no se les busca una solución inmediata.
Es por esto, por lo que se plantea la reeducación con la intención de que los niños aprendan de nuevo las reglas ortográficas que se deben aplicar a través de la escritura, con el fin de que el alumno pueda obtener mejores resultados en su aprendizaje.
¿Qué es la disgrafía?
En esta oportunidad, hablamos de un trastorno del aprendizaje que dificulta la coordinación de la mano y el brazo, por lo que a la hora de escribir, el alumnado encuentra dificultades para dominar el trazado de las letras.
Esto da lugar a que la legibilidad de sus escritos se complique, puesto que es común la aparición de letras de diferentes tamaños, poco uniformes, mal encadenadas e incluso con diferentes inclinaciones.
Además, este tipo de alumnos se caracterizan por no respetar los márgenes de los cuadernos, por lo que un indicio de esta dificultad es que se salten los renglones del mismo.
Pero esto no es todo, ya que la disgrafía puede llegar a representar un incómodo dolor en las manos y muñecas de los alumnos que la padecen, algo que les hará más difícil poder realizar sus tareas con comodidad.
Los alumnos que experimentan la disgrafía, también suelen escribir muy rápido para su edad, o en su defecto, muy lento. Eso sin contar que también presentan dificultades al momento de tomar el lápiz para escribir con normalidad.
¿Cuáles son las actividades para trabajar disgrafía?
Cuando se pretende trabajar disgrafía, estas actividades deben ir dirigidas a disminuir los errores que se cometan con mayor frecuencia, como es el caso de las dificultades motrices, trastornos del esquema corporal, déficit en la función perceptivo-motora, entre otras.
En cada uno de ellos, la aplicación de los siguientes ejercicios les servirá de gran ayuda para mejorar esta condición:
Elección de materiales adecuados
Si un alumno sufre las consecuencias de la disgrafía, una de las mejores cosas que pueden hacer es elegir el material adecuado para que estos puedan agarrar el lápiz de una manera más cómoda.
En estos casos, se recomienda el uso de lápices con superficies de goma, lápices gruesos, o adaptadores para lápices.
En Amazon puedes encontrar estos soportes para el lápiz, que gracias a su diseño reducirán la tensión de la mano y ayudará a mejorar el agarre.
Mandalas para colorear
Son muy eficientes para ayudar a los alumnos a mejorar el control y el agarre eficiente de los lápices que utilicen al momento de escribir. De igual manera, este tipo de actividades ayudarán a mejorar la atención y la concentración de los niños en el aula.
Trazado guiado en el aire
El trazado guiado es uno que se puede llevar a cabo en la pizarra. En estos casos, el educador puede ayudar al alumno a guiar su mano mientras éste comienza a subrayar las líneas dibujadas previamente, con el uso de un rotulador o de tiza.
Por otra parte, el trazado al aire se realiza cuando el alumno simula con los dedos aquellos grafemas que sean indicados por el educador.
Corregir la postura
Esta es una actividad que se repite con mayor frecuencia cuando el alumno se sienta a escribir, siendo esta capaz de ayudarlos a disminuir los dolores que pueden llegar a experimentar durante la toma de un dictado o en cualquier momento en el que escriban.
Manualidades
Para poder trabajar la motricidad con mayor eficacia, una de las mejores actividades puede ser el punzado de letras escritas en una cartulina, o en su defecto el recortado con tijera.
Cada una de estas actividades, además de poder generar excelentes resultados, también contribuyen a que los alumnos mejoren su condición mientras se distraen con actividades que son totalmente fáciles de realizar durante cualquier momento.